Me llamo Amaia Alejos, soy Psicóloga Sanitaria acreditada por Gobierno Vasco y Colegiada en el Colegio Oficial de Psicólogos de Gipuzkoa (Colegiada Numero GZ 02214).

Finalicé mis estudios en psicología en el año 2000. Posteriormente me certifiqué como Experta en Intervenciones Sistémicas por la Escuela Vasco Navarra de Terapia Familiar, aprendiendo técnicas de trabajo con familias. También me certifiqué como experta en Orientación, Supervisión y Coaching por la Universidad de Deusto, aprendiendo técnicas de asesoramiento a personas y grupos para la mejora de dificultades individuales o grupales.

Aunque utilizo todos estos conocimientos en mi consulta, mi principal herramienta de trabajo es el Análisis Bionergético, una técnica psicocorporal en la que no solo se maneja la herramienta de la palabra, sino que se incorpora el trabajo con el cuerpo para producir mejoras en el paciente: te sorprenderá la poderosa herramienta que es tu cuerpo.

Encontré hace ya muchos años en este tipo de psicoterapia una gran herramienta para aprender a vivir de una manera más serena, así como, un espacio para recuperar la salud emocional y física. Con lo cual, decidí formarme como terapeuta en esta disciplina para poder compartir con mis pacientes la riqueza de esta psicoterapia. Actualmente soy Terapeuta en Análisis Bioenergético certificada por el IIBA (International Institute of Bioenergetic Analysis). Al mismo tiempo soy miembro del IIBA, así como de EHABE (Asociación Vasca de Análisis Bioenergético).

En cuanto a mi práctica profesional, he trabajado desde hace 18 años en el ámbito de lo social, principalmente con niños/as, adolescentes y sus familias, que pasaban por momentos de dificultad mas o menos graves y también con víctimas de situaciones traumáticas (agresiones, maltrato, accidentes…). Además, he compaginado esta tarea con la de formar a otros profesionales del ámbito de los Servicios Sociales y Educación para trabajar adecuadamente con estas personas.

Me siento afortunada de poder trabajar como terapeuta, ya que cada proceso terapéutico que empieza es para mí una nueva aventura llena de emociones. Un camino en el que acompañar a la persona en un apasionante proceso en movimiento.